En las
inmediaciones donde todo se distiende
tu cuerpo
deja de adquirir su forma para
tener la
mía.
Y mi forma,
enseguida,
deja de ser
mía para ser tuya.
Y así vamos.
Optamos con mi hijo por ir a desayunar afuera, justo en la mesa que ocupa el vértice entre la galería de un costado y mira de frente a la s...
No hay comentarios:
Publicar un comentario