jueves, 31 de enero de 2019

Más allá

La posibilidad de escindir la tensión
de la imagen, recuerdo o momento
para que ellos dejen de pertenecer
a un punto capaz de involucrarnos en el dolor,
a eso quisiera ir
para poner los pies en el agua.



lunes, 28 de enero de 2019

Anoche soñé con el presidente

En un sueño entendí
que en realidad nuestro presidente
quiere pertenecer al mundo de la gente,
no ser un millonario apartado de todos,
porque entre los estirados y encumbrados
él no se siente parte, ni aceptado,
pero al final no termina funcionando
en un lado ni en el otro. Y es un desclasado.

Lo viví a través de una secuencia
que sitúa al presidente en un antro
donde la gente baila y bebe;
y él quiere hacer lo mismo,
pero su gracia es nula,
y no sé si lo capta
pero lo la gente lo acecha con tensión.
Y en ese clima me desperté.

Amanecía, los pájaros lo celebraban,
el verde se revelaba y el jardín entero
era un lugar de adoración para sí mismo.
y agradecí eso. Y el agradecimiento resultó
una salvación que me elevó de mí mismo.
Y me propuse agradecer todos los días
para vibrar en ese continúo fluir
que tiene el universo y apenas capto.





sábado, 26 de enero de 2019

La física del pensamiento

Me interesa mucho cómo los mismos pensamientos, en tanto son una realidad finalmente física, tienen una dinámica y crean ciertos circuitos que responden a leyes que, por lo tanto, pueden ser, con mucho trabajo, modificados también en función de parámetros físicos.

Es decir que con esquemas diferentes en mi pensamiento puedo afrontar nuevas dinámicas mentales y modificar circuitos inconvenientes para mi desarrollo existencial. Para esto, sin embargo, no es suficiente con repetir determinadas ideas o algo por el estilo, sino que es necesario llegar a una profunda comprensión de las dinámicas mentales que empleamos y estar conscientes en trabajar en su desarrollo.

Las personas, basados en nuestras respuestas a la angustia o el miedo, solemos crear circuitos o dinámicas de pensamiento -por ejemplo el recurrir a determinadas creencias- que en realidad han sido la respuesta, en cierto momento de nuestra historia, a ciertos acontecimientos. Lo llamativo es advertir que esos mismos circuitos -que se suelen tomar como válidos-, son la manera que emplea nuestra mente, una y otra vez, a la largo de los años, e incluso cuando muchas de las causas ya no están, para enfrentar, de un modo limitado, nuevas coyunturas.

Muchas veces, a esas tendencias o circuitos las creemos parte de nuestro carácter. Palabra que entraña una noción de estructura inmutable que en realidad no es tan férrea: la profunda comprensión de que  nuestras creencias existenciales más arraigadas son una construcción y no una realidad, implica que que lo que llamamos "carácter" -que responde en gran medida a dinámicas mentales- puede ser modificado profundamente de una manera trabajosa y lenta.

viernes, 25 de enero de 2019

Para adoración nuestra

Vivíamos conscientes de que ese tiempo no iba a durar
porque las cosas preciosas y divinas
no duran hasta convertirse en un hábito.

Y sin embargo, ahora mismo, nos esforzamos
lo indecible para recuperar esos días,
dispuestos en nuestra memoria,
para adoración nuestra.

Flores en lo alto de la montaña

Tenemos un tiempo limitado y una energía limitada, de manera que espero ver dónde se ubica mi potencia porque ahí van mis deseos, y donde van mis deseos está mi impulso hacia el tiempo. Se juega mi avance.

Pero lo curioso es que, cuando veo dónde pongo mis deseos, noto que una energía enorme la tengo puesta en puntos fantásticos, irreales, de imposible cumplimiento, o bien de un cumplimento que de concretarse implicaría, por los costos acumulados, un estado general no deseado. Es decir, muchas veces deseo objetivos que no tengo en realidad bien calibrados, y eso me obliga a ir detrás de flores que solo veo en lo alto de la montaña.




lunes, 21 de enero de 2019

Parece ser un técnico, Brisbane. Australia

Vamos en un pequeño ómnibus que nos transfiere desde un lugar cercano al aeropuerto. Acabamos de dejar el auto alquilado. Junto con nosotros viaja un hombre mayor que trabaja en el aeropuerto. Parece ser un técnico. Me llama la atención que es un hombre de unos setenta años. Usa el celular mientras viaja. Y luego detiene sus acciones y, con una expresión que parece de gratificación, se limita a contemplar el paisaje por la ventana. Me pregunto qué estará pensando. Tal vez en ese grupo de personas que han creado las máquinas que hoy gobiernan sus últimos años, en cómo le han dado vida a un mundo que ahora también los gobierna a ellos, y en cómo el mundo, en función de redes que alguna vez estuvieron en la mente de esos hombres, avanza. O tal vez piense en sus antepasados. En cómo llegaron a estas tierras, vencieron a quienes estaban, los diezmaron y ahora, gracias -entre otras muchas cosas- al comercio con millones de hacinados asiáticos, viven en lo que él considera el último reducto de tierra feliz y promisoria en el mundo. ¿O estará pensando en cómo vivir sin hacer mucho tomando contacto con la profundidad de su existencia?


sábado, 19 de enero de 2019

Main beach, Noosa Heads

En el agua quise concentrarme
en el océano tibio y expectante
por ser parte de lo que podía sentir y tener
desde que no quería estar más separado
del cuerpo inmenso ni apartado del mundo.


miércoles, 16 de enero de 2019

Todas esas cosas pido

Un mundo nuevo, una forma especialmente adorable de decir las cosas,
la posibilidad incluso de no luchar para que las cosas deseadas sucedan,
una concentración suficiente como para que las lagrimas salgan
cuando los peores temores se acerquen
listos para recordarnos la enorme peligrosidad de la vida.
Todas esas cosas pido.

martes, 15 de enero de 2019

Canales energéticos encriptados

Tal vez la mente, en el inicio de nuestra vida, establece sus modos, sus circuitos de supervivencia, y éstos quedan encriptados en nosotros, y nosotros, que no estamos realmente al tanto de esos canales que quedan construidos, vamos, días de días, años de años, empujados por esos mismos canales que en realidad vibran con métodos que responden a circunstancias y estados de un pasado remoto.

Es como que tenemos los vagones y las vías de una era antigua mientras transitamos el presente.

Y por supuesto, aun en un estado de consciencia respecto de esos métodos o cuadros, nos es altamente difícil modificar esas conductas porque ellas son esenciales en nosotros, se desenvuelven dentro de canales firmemente establecidos, unos que forman un esquema primordial.

Y es el desafío de una vida moldearlos.

Del mismo modo, que es nuestro desafío desprendernos de todos los mandatos, discursos y creencias, recibidas en ese esquema primordial para construir nuestro propio estar en el mundo. Uno muy íntimo, incomparable al resto y con sus propias medidas.

No pertenecer a determinado sistema, ser uno el propio sistema.

lunes, 14 de enero de 2019

Noosa Heads, poemas

Un punto de feliz abandono
en las grutas en donde se calienta todo.
Eso esperamos aquí de ahora en más.
Brutales tardes, unos y otros, asumidos
como personas que adoran la vanidad
de la naturaleza a la hora de seguir 
al tiempo. Y al tiempo mismo,
como la presencia que mantiene
su puntilloso ir para que muchos vivan.

Y lagartijas, muy simpáticas, pequeñas,
que para qué nos siguen?

domingo, 13 de enero de 2019

En el Zoo de Sidney

¿Entre toda esta gente y todos estos animales,
que se miran, a veces, por instantes, o de a ratos,
unos a los otros, y que se mueven o reposan
en busca de algo que no está por acá,
quién se apiada del otro para que las miradas
tengan una efímera belleza?

sábado, 12 de enero de 2019

Por eso nos decimos valientes

Hay un momento de la vida en que, con suerte,
dejamos de creer en las fábulas o en algún tipo 
de verdad o salvación posible, y nos encomendamos 
a nuestros propios límites.

Y con ellos vamos a la espera de algo superior o mejor.
O incluso a la espera de un manto de luz que nos provea una paz
duradera y excepcional. Pero después, casi enseguida,
sabemos que ese camino involucra un montón de tiempo
en el horizonte lejano.

Y sin saber si eso es en verdad posible, hacia allá vamos.
Por eso nos decimos valientes.

miércoles, 9 de enero de 2019

Poemas en Sidney

Con el paso del tiempo aspiro a ser más honesto.
Y eso, en esencia, es todo. La honestidad, ahora lo veo,
es la fuente de la que emanan todas las verdades. O mejor dicho,
todos los caminos posibles hacia cierto avance, purificación o como
queramos llamar al asunto.

Sidney es la ciudad que siempre soñé.
Mar, playas, bahías, vegetación y al mismo tiempo prosperidad
en todas las formas posibles de humanidad.
Pero los sueños tienen un plano de irrealidad que aquí,
por supuesto, no termino de palpar porque estoy conmigo mismo,
lo que equivale a decir que estoy con las miserias propias de mi psiquis:
un esmerado tanteo en la imposibilidad de acceder a un placer franco,
relajado, incondicionado.

Y al mismo tiempo, y eso es la extraño, una gran consciencia
acerca de la riqueza sensorial que tiene el dramatismo, la valoración
de las circunstancias solo a través de su reverso: la angustia que al final,
con suerte, y por un breve momento, posibilita un placer casi irreal.

Creo que al final podría llegar, con los años, siendo objetivo,
y con un persistente trabajo, a un mundo más reposado,
mucho más contemplativo y por sobre todo carente de la expectación,
de la carga libidinal que supone la fijación de metas,
pequeñas y estrictas, en torno a asuntos que se nos escapan,
que nos superan. En definitiva, que no controlamos.

Llegar a un mejor autocontrol a través de la capacidad de aceptar
incluso los desvíos, las debilidades de la marcha y, al mismo tiempo,
saber que estamos avanzando hacia un mejor punto.
Eso es el resto de lo que parecería que queda.

lunes, 7 de enero de 2019

Liberación de maestros, sistemas y afines

Nos liberamos de todos los maestros, o al menos lo intentamos. 
Y lo mismo con todos los elevados destinos, ideas, sistemas, formas 
y estrictos parámetros que podrían volvernos más bellos, sabios o admirables. 
Y nos fuimos al río a contemplar el agua pasar, y un montón de aves
estaban con nosotros, y al igual que nosotros se posaban sobre el pasto,
sentían -imaginamos- su blandura, su -de alguna forma- inocencia, 
y nos reímos en la medida que nos permitió ese tiempo. 
Una cálida tarde de inverno. Y cuando la luz se iba, 
aparecieron las estrellas, miles, incontables, mudas. 
Y las miramos buscando darle un sentido importante 
y exacto a ese momento, y nunca estuvimos seguros de nada. 

jueves, 3 de enero de 2019

Whitianga, NZ

Imaginamos enormes continentes
listos para ser asaltados por nuestro cuerpo
que al fin deja de ser un peligro desafiante.

Y pasa a convertirse en algo que es versátil
por la misma consciencia de un mundo íntimo.

Y ese mundo se acopla con el resto de lo que anda por ahí,
estableciéndose en un lado y en el otro,
sin ánimo de conquista,
sino más bien con la intención de ser interpelado
por eso que está enfrente
como a la espera de cierta tierna proximidad.

miércoles, 2 de enero de 2019

Frente al lago Roturua


Voy hasta el final del camino donde se ve el lago
y me siento a meditar sobre un borde.
Después de mucho rato logro un estado fantástico.
Creo que nunca pude estar erguido tanto tiempo.
Es por la fuerza de mi propia energía concentrada.

Llega un grupo de japoneses. Los escucho
resueltos a alimentar a una gaviotas.
Cada vez se me acercan más, están cada vez más cerca,
casi me rozan; atraen entre risas a los pájaros.
Quiero agradecer su presencia,
aferrarme a su intromisión
para darle un sentido espléndido.
Pero es en vano.

No vamos a lograr seguramente un estado
de compasión y ternura que nos permita
evadirnos de las vicisitudes de los días
y ya eso no importa
porque toda esa fantástica furia
nos permitirá ir incluso más allá de títulos o lugares
para dejar de lado unas parábolas
que ya no enseñan nada.

Hablo de verdades listas para caer
por un precipicio que espera la llegada del agua.

martes, 1 de enero de 2019

Feliz año nuevo desde Urban Route, Auckland

Una cansada manera de encarar los años, sus pasos,
los mendigos en las veredas, las fabulosas luces
a lo largo de las calles, en los taxis,
cerca de la gente que se aproxima
a un punto de celebración suficiente
para fijar una paz que sea duradera, interior,
eso me parece que buscamos hoy,
mientras vamos por esta avenida,
vibrante por los festejos,
que enseguida irán menguando,
mientras arriba, las estrellas, incluso ellas,
nacen y mueren, y más arriba,
una fuerza superior, creadora,
y más vibrante que nuestros festejos,
permanece ajena a sus derivaciones
hasta que alguno, uno muy afortunado,
logra conectarse con algo de lo que es esa fuerza,
con algún tipo de vibración o reflejo de su alcance,
que también enseguida se apaga.

Teros a lo lejos

  Porque hace mucho viste el fuego y el humo  desde los pastizales  acercándose a tu cuerpo.   Y desde entonces, una coraza  recibe la brea ...