Estimamos que, como nos ha pasado antes, algún día vamos a valorar con nostalgia
este tiempo que ahora sentimos un tanto falto del tipo de certezas
que alguna vez soñamos. Quiero decir con esto: que deseamos demasiado,
que agradecemos poco, y que somos infantiles también en eso.
El avance es que lo advertimos, y que maravillados por el clima de hoy,
por los árboles y sus pájaros, las plantas todas, el verde milagroso por todos lados,
y la posibilidad de decir lo que se nos antoje
en este preciso instante y en este preciso lugar,
afrontamos el día con la esperanza de modificar lo mínimo hoy
para que mañana sea un poco diferente todo.
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domingo, 7 de octubre de 2018
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