domingo, 17 de mayo de 2020
Lo que cabe en un girasol
Sueño con colores, o en realidad los colores pasan por mi mente y también las formas. Hay una asociación nueva que busca la textura de las pinceladas, la fuerza de los colores, su historia, esas historias anteriores al renacimiento, esos momentos de los albores, ese punto en que se vislumbró un nuevo comienzo. El mío quiero -ya quiero realmente- que sea más modesto, más personal, íntimo, algo para mí mismo; algo fuera de todas las escenas puestas por los intereses de los grandes sistemas culturales. Si hubo algo grande en la historia lo celebro, pero más celebro mi propia historia. Lo que cabe en un girasol.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Casi enseguida
Frente a una vidriera comentabas: Ese cuadro no es abstracto. Si lo ves bien, habla de unos pantanos donde una cigüeña mira los cuer...
-
Creo que es mejor que les cuente un poco de Carola. Una premisa que no es sencilla porque mis percepciones cambiaron con los años de manera ...
-
Vuelvo de la playa abrumado. Y lo peor no es esa sensación tan grande, lo peor es cuando la realidad te persigue y te alimenta: hoy iba por ...
-
Y desmoronado como estaba recibí el lazo sagrado. Entró en mí el juguete voluptuoso de Flavia. Y cuando entró, empecé a sentir un dolor que,...
No hay comentarios:
Publicar un comentario