Había una señora atrás tuyo en la misa, una señora de unos sesenta y pico de años que te tocaba apenas la espalda de un modo bastante erótico, y vos cada tanto te dabas vuelta a ver a esa señora. Ella te generaba una atracción extraña por sus caricias y un rechazo por su aspecto... Y mientras tanto un cura muy pequeñito daba misa en italiano en un tono cansino y bajo...
viernes, 5 de agosto de 2022
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Los mismos caballos
Los mismos caballos junto a espinillos como oradores al costado del camino. Y a la ida y a la vuelta, la obsesión de no pensar. También el...
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