martes, 31 de diciembre de 2019

Fuerza e intuición cerca de la fuente de Cibeles


La pequeña rama -casi negra ya- 

que lleva la corriente por la calle

al filo de una cuneta, me permite

llegar al silencio de los hielos 

que reciben otras ramas 

caídas desde los bosques.

 

Pasan los taxis, pocas personas caminan. 

El año nuevo se acerca. Vamos de la mano

entre a los edificios emblemáticos del centro

deteniéndonos en las fuentes 

que permanecen en funciones. 

 

El viento no se calma y la reunión 

de dos zorritos blancos 

en un cartel 

nos enternece.

 

 

No hay comentarios:

En la tierra helada

  Pero a los pocos días, andando por el jardín de tu casa, pisé unas hormigas y aparecieron de nuevo las tragedias que podrían tocarme en la...