El tiempo pasa rápido,
cada vez más rápido.
Cuando éramos jóvenes,
ese tiempo era más lento.
Una curva suave
entre las montañas
que después se volvía
más pronunciada
y, casi enseguida
dejaba ver
un valle.
Soñé que estaba en un ómnibus en una ciudad francesa —tal vez Lyon— y no sabía bien dónde debía bajarme. Después de dudar y no animarme a ...
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