En las rosas chinas,
cantaban los pájaros.
No estaba claro
si por el ímpetu del paisaje
o porque tenían
unas ganas tremendas
de cantar.
Esa tarde, leo ahora en un cuaderno donde anotaba distintas cosas, mientras pedaleaba, veía unos niños que para evitar la lluvia se oculta...
No hay comentarios:
Publicar un comentario