domingo, 22 de mayo de 2022

El hombre perfecto

 

Te habías vuelto un hombre más tranquilo. No había en vos nada que diga:"No es conveniente que veas tele todo el domingo." Así la veías. Eras una persona estable para los demás y para vos mismo. Muchos, según te decían, estaban satisfechos con tu desempeño en el trabajo, un lugar donde especialmente te volvías alguien querido y respetado. Se decía  que eras predecible y amable, devoto del trabajo incluso escuchaste decir, y también de los deportes agregarías vos, dado que eran tu válvula de escape, según decías. No tenías deseos que fueran tan extremos como para enviarte a luchar demasiado con algún tipo de asunto. Habías leído el Tao Te King y eras capaz de ser bastante pasivo con lo que había a tu alrededor.....,La mayoría de las películas te gustaban... Tu terapeuta te había felicitado y dado de alta y con tu mujer e hijos eran capaces de ir de visita a lugar turísticos para hacer colas y obtener una foto en el lugar indicado.

No hay comentarios:

Los mismos caballos

  Los mismos caballos junto a espinillos como oradores al costado del camino. Y a la ida y a la vuelta, la obsesión de no pensar. También el...