martes, 10 de enero de 2023

El agua se encendía

 

El canal seguía agitado por el viento. La iglesia se iluminó, se habían corrido las nubes, el agua se encendía. Miraste entonces otra vez el mar donde ajenos y mudos nadarían los peces, y en tu recuerdo ella volvió a alejarse sobre los adoquines de la parte antigua. Había parado de llover, era tarde en la noche y la humedad ayudaba a oír sus pasos que se acompasaban a las pequeñas olas.

No hay comentarios:

Los mismos caballos

  Los mismos caballos junto a espinillos como oradores al costado del camino. Y a la ida y a la vuelta, la obsesión de no pensar. También el...