Archivo del blog

martes, 21 de marzo de 2023

Una vida


Un vida. Debía contarla y para eso debía levantarme cada mañana y antes de ir a trabajar, antes de ganarme el pan, debía escribir al menos una hora, cosa de avanzar. Y eso hice. Pero todo lo que conté era mi vida y mi vida no podía ser contada porque significaba hablar de cosas que otros no debían saber. Porque me convenía no confesar ciertos actos y porque era mejor que otros no se enterasen de mis indiscreciones. No quería herirlos. Y sin embargo mi vida era lo mejor que tenía para contar...

No hay comentarios:

Acrópolis

  Aún te creías capaz de realizar  un progreso importante. En tu infancia,  un lobo marino se acercaba  a tomar los peces  que ponías en la ...