sábado, 1 de julio de 2023

Sobre una roca

Lo que más me interesa, desde siempre, es ser capaz de pintar sin el más mínimo realismo un día de invierno en plena cordillera. Tal como esa tarde que no se escuchaba nada. Ni un pájaro; apenas el ulular del viento. Sobre una roca veíamos lo terroso y lo rojo de la montaña a nuestro alrededor y por todos lados, y cada vez más arriba todo era más oscuro y después venía la nieve, lo blanco. Y arriba de las montañas, girando en círculos, andaban los cóndores. Ahí donde todo era frío y salvaje. 

 

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Según avanzaba

  Esa tarde, leo ahora en un cuaderno donde anotaba distintas cosas, mientras pedaleaba, veía unos niños que para evitar la lluvia se oculta...