domingo, 7 de abril de 2024

De regreso a casa

 


De regreso a casa,

recordaba los grandes almacenes 

de mi pueblo en la época que me imaginaba

distintas aventuras con mujeres suecas

en donde tenía de socio a un fauno.

 

Con ese fauno íbamos junto a unos perros

por caminos estrechos de piedras 

y de barro. 

 

Vino entonces la noche y la lluvia.

Cuando entré a casa, vi que la tortuga dormía 

mientras la perra a buen resguardo la miraba,

intenté hablar de cosas sin importancia

y más tarde ayudé a nuestra hija 

con sus inquietudes existenciales.

Y después a nuestro hijo,

que debía estudiar para un examen.

 

Gracias a esa epopeya, logré 

que el viento me pegue en la cara.

Las ventanas de mi cuarto estaban abiertas. 

Solo tuve que acercarme 

para que el aire me bañe. 

 

 

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