Quisiéramos ambientar este lugar
con la fundición de las campanas
de cada uno de los pequeños pueblos
y hacer una escultura
para ir en la búsqueda de eso
que no podemos ver ni enunciar,
es más grande que nosotros y cambia todo
hasta dar con el sutil agradecimiento
de lo cercano y lejano.
Hablo de lo que podría ser,
es y no es, y que estará siempre,
para la completa adoración nuestra.
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sábado, 1 de diciembre de 2018
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