Durante la noche nuestra mente continúa sus labores
en busca no sabemos bien de qué. Despliega imágenes,
arma historias la mayor parte de la veces espeluznantes.
Y cuando amanece,
las cosas vuelven a tomar su formas,
vuelven a significar lo que para nosotros significan.
Y nuestra mente sigue en su tarea de dar respuesta.
Pero las incontables cosas que nos pasan cerca
siguen, fluyen hacia otros lados
ajenas a los esfuerzos de nuestra mente.
¿O las cosas responden a ella?
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jueves, 28 de marzo de 2019
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